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Involucramiento de Hombres y Niños en la Planificación Familiar: Guía para la Planificación Estratégica

El presente documento tiene por objetivo orientar a los directores de programas, los planificadores y los tomadores de decisiones a través de un proceso estratégico que permite identificar cuáles inversiones son eficaces para involucrar a los hombres en los esfuerzos que apuntan a mejorar la salud sexual y reproductiva. En esta guía, el involucramiento masculino se refiere al involucramiento de los hombres y de los niños en los programas de planificación familiar en todas las etapas a lo largo de sus vidas, incluido el abordaje de las normas de género y de la igualdad de género.

Esta guía fue elaborada basándose en estudios publicados en materia de estrategias para el involucramiento masculino en la planificación familiar 1-8 y en la información proporcionada por expertos en la materia. A lo largo de los siguientes pasos, los programas deben tener en cuenta los contextos específicos y las necesidades diversas de los beneficiarios del programa. Los ejemplos que se proporcionan dentro de cada paso ilustran cómo identificar los puntos desatendidos y los problemas que requieren una solución y muestran los enfoques de la programación que deben tenerse en cuenta. La prioridad principal de cualquier programa de planificación familiar, cuando se considera el involucramiento de la pareja, es respetar las preferencias de la usuaria, en cuanto a si involucrar a su pareja o no, y hacerlo en formas equitativas que protejan y fomenten la autonomía de las mujeres.

* Afeefa Abdur-Rahman, Michal Avni, Karen Hardee, Joan Kraft, Rebecka Lundgen, Erin Mielke, Tim John Shand, Dominic Shattuck, Caitlin Thistle, and Shegufta Shefa Sikder.

Una activista de la salud acreditada (ASHA) en la India explica diferentes métodos de planificación familiar a una pareja, al tiempo en que la joven esposa es intimidada por la cámara. © 2016 Arvind Jodha/UNFPA, Cortesía de Photoshare

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Las necesidades de salud sexual y reproductiva de los hombres difieren según la etapa de sus vidas, dependiendo de si son adolescentes, o comienzan a explorar las relaciones sexuales, o son sexualmente activos, o recién casados, o padres primerizos, o si sus familias están creciendo, o lo hacen en forma más espaciada, o si han alcanzado el tamaño ideal de familia. A lo largo de las etapas de la vida, los hombres se esfuerzan para cumplir con roles y expectativas, mientras que exhiben comportamientos que pueden ya sea facilitar o inhibir las relaciones sexuales sanas. Los diseñadores de programas deben especificar los comportamientos que desean afectar y deben utilizar indicadores adecuados para registrar los cambios en dichos comportamientos en el transcurso del tiempo. Debe tenerse en cuenta que las normas sociales acerca de la sexualidad y las relaciones se forman en la fase temprana de la adolescencia (Ver Global Early Adolescent Study). Para programas que abordan las necesidades de los niños adolescentes, the Strategic Planning Guide for Adolescents ofrece más información y sugerencias.

Entre las metas comportamentales habituales de la programación del involucramiento masculino se encuentra aumentar la participación masculina en calidad de:

  • Usuarios de métodos anticonceptivos (por ejemplo, condones y vasectomía) o parejas que utilizan los métodos que requieren una cooperación activa (por ejemplo, el Método de Días Fijos)
  • Parejas que mantienen una comunicación abierta y participan en la toma de decisiones respecto a la planificación familiar y el uso de métodos anticonceptivos
  • Defensores de la igualdad de género y la planificación familiar en sus familias y comunidades

Los programas de planificación familiar típicamente apuntan a impartir información y a hacer llegar mensajes a las mujeres y a las niñas; sin embargo, las mujeres y las niñas pueden no ser quienes realmente toman las decisiones respecto a su propio uso de anticonceptivos. Proporcionar información correcta y completa facilita el involucramiento activo de los hombres como parejas dispuestas a apoyar el uso de anticonceptivos, o que defienden el uso de métodos anticonceptivos, o que los utilizan. La información incorrecta y las actitudes o creencias negativas — tales como que utilizar métodos anticonceptivos hace a los hombres menos “masculinos” o que utilizar métodos anticonceptivos causa infertilidad — pueden generar barreras para el acceso y el uso de métodos anticonceptivos. Dichas creencias pueden dar lugar a una disminución en el uso de condones o el número de vasectomías, así como disminuir el grado de apoyo de los hombres a otros métodos anticonceptivos.

Entre las áreas importantes a tener en cuenta para la evaluación del conocimiento y las actitudes se encuentran:

  1. Conocimiento de la pubertad y de la reproducción a lo largo del ciclo de vida, por ejemplo:
  • En los niños, conocimiento de los cambios físicos, sociales y emocionales que tienen lugar durante la pubertad
  • En los hombres jóvenes, conocimiento de la reproducción y de la menstruación de la mujer, y temas relacionados
  • Conocimiento del período de fertilidad
  1. Conocimiento, creencias y actitudes respecto a la planificación familiar y los métodos anticonceptivos, en particular en la medida en que se relacionan con la función sexual y los roles sociales basados en el género, por ejemplo:
  • Conocimiento de los métodos individuales, cómo funcionan y sus efectos secundarios
  • Tamaño ideal de la familia
  • Creencias acerca de cómo la anticoncepción afecta la salud, el trabajo y la fertilidad a futuro
  1. Conocimiento, preferencias y percepciones acerca de los servicios de planificación familiar, por ejemplo:
  • En hombres y niños, conocimiento de la disponibilidad de servicios de planificación familiar
  • En hombres y niños, conocimiento de las características preferidas respecto a los servicios anticonceptivos, los profesionales del servicio y las instalaciones de salud

Las normas de género — las reglas o expectativas que conforman y regulan el comportamiento “adecuado” de los hombres y las mujeres — influyen en la salud sexual y reproductiva. Durante sus vidas de adultos, los hombres a menudo poseen mayor peso que las mujeres en la toma de decisiones familiares, tales como cuándo comenzar una familia y cuántos hijos tener. Este desequilibrio da lugar a una comunicación inequitativa dentro de la pareja en cuanto refiere a las intenciones de fertilidad y el uso de métodos anticonceptivos. En muchos países, existen normas de género que idealizan la ignorancia sexual en las niñas y la destreza sexual en los niños. Dichas normas pueden impedir el acceso de las niñas a la información y los servicios y a la capacidad de negociar en las relaciones sexuales.9,10

Los hombres juegan un papel importante en el desafío a las normas de género inequitativas y el fomento de normas positivas, en particular en el contexto de sus pares e hijos.11-13 Algunas de las causas comunes por las que las inversiones en prestación de servicios de planificación familiar no alcanzan los resultados esperados radican en no abordar temas tales como el estatus social subordinado de las mujeres, su dependencia económica del hombre y su limitada capacidad de acción, la dinámica de poder en el núcleo familiar y las normas masculinas perjudiciales.14,15

Antes de diseñar una respuesta programática, aclare las normas subyacentes que influyen en los comportamientos clave:

  • ¿Las mujeres son capaces de — y se les permite— articular y actuar de acuerdo a sus preferencias en lo que se refiere a las relaciones sexuales y el uso de anticonceptivos?
  • ¿Se habla acerca de las intenciones de fertilidad dentro de la pareja?
  • ¿Las mujeres creen que necesitan el permiso de sus parejas, esposos o compañeros sexuales, o de alguna persona responsable, para utilizar o pagar los servicios de planificación familiar?
  • ¿Se considera socialmente “adecuado” que los hombres y los niños apoyen la planificación familiar? ¿Cuáles son los impactos sociales para los hombres y los niños tras involucrarse en comportamientos de equidad de género?
  • ¿La violencia perpetuada por el compañero íntimo/violencia conyugal es un factor adverso clave habitual en las relaciones sexuales?
  • ¿Cuáles son las expectativas acerca de las responsabilidades compartidas en el hogar y el cuidado de los niños en las comunidades?

Para responder estas preguntas, realice un análisis de género de fuentes de datos secundarios (por ejemplo, encuestas demográficas y sanitarias, publicaciones académicas arbitradas) u obtenga datos primarios mediante entrevistas con informantes clave y debates grupales con clientes y proveedores. Pueden encontrarse herramientas útiles a partir de Interagency Gender Working Group.

Después de aclarar las normas relevantes, identifique las personas cuyas opiniones importan a los hombres y que pueden influir en dichos comportamientos particulares. Entre dichos individuos pueden encontrarse líderes comunitarios, padres/padrastros, líderes religiosos, profesionales de los servicios de salud, o ejemplos positivos (es decir, aquellos que practican el comportamiento deseado). Asimismo, identifique las fuentes y las ubicaciones donde los hombres y niños prefieren recibir información y servicios de salud sexual y reproductiva.

La siguiente tabla muestra ejemplos de Prácticas de Alto Impacto (HIP, por sus siglas en inglés) en materia de cambio social y comportamental y de prestación de servicios que pueden diseñarse para fomentar el involucramiento masculino. Las marcas de verificación indican qué HIP podría adaptarse de forma específica para cumplir los objetivos de involucramiento masculino típicos. Considere la utilización de una combinación de prácticas para lograr un efecto mayor. El monitoreo de los datos debe incluir medidas de resultados tanto de género como de planificación familiar. Desagregue los resultados por edad, sexo, estado civil y otras características contextualmente relevantes de forma tal de asegurar que se cumplan los objetivos del programa y que la prestación de servicios sea equitativa para los beneficiarios.

Tabla 01.

Cambio Social y Comportamental y Prácticas de Alto Impacto comúnmente utilizadas para fomentar el involucramiento masculino

Práctica de alto impacto
La práctica puede …
 Enfoques
Mejorar el conocimiento y las actitudes Abordar las normas Aumentar el acceso a la anticoncepción masculina
Categoría de Cambio Social y Comportamental: Considere integrar el manejo de información compartida y los debates en los espacios tradicionalmente masculinos tales como los proyectos rurales o los comités de desarrollo.
Medios de comunicación ✓ ✓ Radio, televisión, letreros publicitarios, periódicos
CInvolucramiento de los grupos comunitarios ✓ ✓ Contexto propicio para el diálogo y la reflexión dentro de los grupos comunitarios y entre ellos, teatro callejero, involucramiento mediado por líderes religiosos/comunitarios.
Salud Digital para los usuarios ✓ ? Medios sociales, tecnología de respuesta de voz interactiva, aplicaciones para teléfonos celulares.
Comunicación Interpersonal: coming otoño 2018 ✓ ✓ Línea de emergencia, motivadores masculinos y pares educadores/mentores, ejemplos positivos.
Categoría de Prestación de Servicio: Considere que los hombres y los niños a menudo prefieren acceder a los servicios en contextos no institucionalizados e informales.
Servicios itinerantes de largo alcance ✓ ✓ Particularmente importantes para servicios tales como la vasectomía, los cuales requieren un alto nivel de pericia clínica.
Trabajadores comunitarios de la salud ✓ ✓ ✓ Los trabajadores comunitarios de la salud pueden motivar a los hombres a apoyar la planificación familiar y desarrollar la capacidad de comunicación dentro de la pareja.
Farmacias y droguerías, Mercado social ✓ Las farmacias y droguerías a menudo son una fuente preferida por los hombres y los niños para la compra de anticonceptivos.
  • Desarrolle y ensaye la difusión de mensajes dirigidos específicamente a los hombres y a los niños que tienen repercusión en el idioma y la cultura locales. De la misma forma, los diseñadores deben buscar los canales de información y los influenciadores apropiados para llegar a los hombres y a los niños.
  • Apoye la reflexión, a nivel individual y comunitario, sobre las normas, las expectativas y los roles que tienen que ver con la salud reproductiva, el tamaño de la familia, el cuidado de los niños y la anticoncepción en diferentes etapas de la vida a través del involucramiento de grupos comunitarios. Como parte de este esfuerzo, considere cómo involucrar a los miembros de la comunidad para que apoyen a los hombres que actúan de forma que fomentan los comportamientos sexuales y reproductivos positivos.
  • Asegúrese de que la información y los servicios de planificación familiar sean accesibles y acogedores para los hombres y los niños. ¿El horario de atención de la clínica es accesible y compatible con la disponibilidad horaria de los hombres? ¿Los materiales de información, educación y comunicación están dirigidos tanto a los hombres como a los niños? ¿Las parejas masculinas se sienten bienvenidas en las sesiones de asesoramiento y servicios de planificación familiar? ¿Hay disponibilidad de profesionales masculinos en el servicio? ¿Se ofrecen otros servicios de salud reproductiva (por ejemplo, servicios de VIH y otras infecciones de transmisión sexual)?
  • Diseñe programas que vayan donde están los hombres, tales como programas implementados en el sitio de trabajo; programas de uso del agua, saneamiento y sanidad dirigidos a los hombres; cooperativas; sindicatos de trabajadores; planes de ahorro y de préstamo; y programas de extensión agrícola.
  • Incluya estrategias para llegar a las parejas femeninas cuando diseña programas que apuntan a aumentar el uso de métodos anticonceptivos masculinos.

Por más información sobre los informes de HIP y sobre el trabajo de la iniciativa HIP, refiérase al sitio web de High Impact Practices in Family Planning en www.fphighimpactpractices.org o contáctese con el equipo.

  1. Perry B, Packer C, Chin Quee D, Zan T, Dulli L, Shattuck D. Recent experiences and lessons learned in vasectomy programming in low-resource settings: a document review. Durham, NC: FHI 360 and Washington, DC: Population Council, Evidence Project; 2016. https://www.fhi360.org/sites/default/files/media/documents/resource-vasectomy-lit-review-final.pdf. Accessed December 11, 2017.
  2. Croce-Galis M, Salazar E, Lundgren R. Male engagement in family planning: reducing unmet need for family planning by addressing gender norm. Washington, DC: Institute for Reproductive Health; 2014. http://irh.org/resource-library/male-engagement-family-planning-reducing-unmet-need-family-planning-addressing-gender-norms/. Accessed August 5, 2016.
  3. Edström J, Hassink A, Shahrokh T, Stern E, editors. Engendering men: a collaborative review of evidence on men and boys in social change and gender equality. EMERGE evidence review. Promundo-US, Sonke Gender Justice, and the Institute of Development Studies; 2015. http://promundoglobal.org/wp-content/uploads/2015/09/EMERGE-Engendering-Men-Evidence-Review.pdf. Accessed July 18, 2016.
  4. Dworkin SL, Fleming PJ, Colvin CJ. The promises and limitations of gender-transformative health programming with men: critical reflections from the field. Cult Health Sex. 2015;17(suppl 2):S128-S143. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4637253/
  5. Withers M, Dworkin SL, Onono M, et al. Men’s perspectives on their role in family planning in Nyanza Province, Kenya. Stud Fam Plann. 2015;46(2):201-215. https://doi.org/10.1111/j.1728-4465.2015.00024.x
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  7. Shattuck D, Kerner B, Gilles K, Hartmann M, Ng’ombe T, Guest G. Encouraging contraceptive uptake by motivating men to communicate about family planning: the Malawi Male Motivator project. Am J Public Health. 2011;101(6):1089-1095. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3093271/
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  9. Gay J, Croce-Galis M, Hardee K. What works for women and girls: evidence for HIV/AIDS interventions. 2nd ed. Washington, DC: Futures Group, Health Policy Project; 2012. http://www.whatworksforwomen.org. Accessed December 11, 2017.
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  12. Greene ME, Gay J, Morgan G, Benevides R, Fikree F. Literature review: reaching young first-time parents for the healthy spacing of second and subsequent pregnancies. Washington, DC: Pathfinder International, Evidence to Action Project; 2014. http://www.e2aproject.org/publications-tools/pdfs/reaching-first-time-parents-for-pregnancy-spacing.pdf. Accessed December 11, 2017.
  13. Singh S, Darroch JE, Ashford LS. Adding it up: the costs and benefits of investing in sexual and reproductive health 2014. New York: Guttmacher Institute; 2014. http://www.guttmacher.org/pubs/AddingItUp2014.pdf. Accessed December 11, 2017.
  14. Doyle AM, Weiss HA, Maganja K, et al. The long-term impact of the MEMA kwa Vijana adolescent sexual and reproductive health intervention: effect of dose and time since intervention exposure. PLoS One. 2011;6(9):e24866. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3172301/
  15. Wight D, Plummer M, Ross D. The need to promote behaviour change at the cultural level: one factor explaining the limited impact of the MEMA kwa Vijana adolescent sexual health intervention in rural Tanzania. A process evaluation. BMC Public Health. 2012;12:788. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3490722/

La iniciativa HIP elabora informes que sintetizan los datos de la evidencia y proporcionan los aprendizajes obtenidos mediante la experiencia acerca de cómo implementar las HIP seleccionadas.

La presente Guía para la Planificación Estratégica cuenta con el aval de: Abt Associates, Bill & Melinda Gates Foundation, Care, Chemonics, EngenderHealth, FHI360, FP2020, Georgetown University/Institute for Reproductive Health, International Planned Parenthood Federation, IntraHealth International, Jhpiego, John Snow, Inc., Johns Hopkins Center for Communication Programs, Management Sciences for Health, Marie Stopes International, Options, Palladium, Pathfinder International, Population Council, Population Reference Bureau, Population Services International, Promundo US, Public Health Institute, Save the Children, U.S. Agency for International Development, y University Research Co., LLC.

La Organización Mundial de la Salud/Departamento de Salud Reproductiva e Investigaciones Conexas y la iniciativa Implementing Best Practices (IBP) han contribuido al desarrollo del contenido técnico de los informes de HIP.

Tradução para o português pela OPS/CLAP/SMR. Revisado por Ados Velez May, IBP Initiative

Prácticas de alto impacto en la planificación familiar (PAI). Involucramiento de Hombres y Niños en la Planificación Familiar: Guía para la Planificación Estratégica. Washington, DC: USAID; Enero de 2018. A disposición en la siguiente dirección:  https://www.fphighimpactpractices.org/es/guides/involucramiento-de-hombres-y-ninos-en-la-planificacion-familiar/